“Fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.”
(1 Corintios 10:13)
Si Dios me pone a prueba, puedo contar con su fidelidad, pues ha medido mis fuerzas del mismo modo que ha medido o contado el tiempo de la prueba que me envía. Conoce, pues, el comienzo y el final y, mientras tanto, está conmigo. ¡Eso es la gracia!